Dani Rovira y su foto disfrazado con una cabeza de burro publicada en redes. (Foto: Instagram)

Dani Rovira, valiente y sin perder el humor, habla de su quimio

El actor Dani Rovira compartió el pasado 25 de marzo en sus redes el diagnóstico que cambió su vida, un linfoma de Hodgkin. El protagonista de Ocho apellidos vascos, muy popular y querido, se ha sometido a ocho sesiones de quimio y ahora, antes de comenzar con las de radio, ha decidido compartir con sus fans lo que ha vivido durante las últimas y duras semanas. Parece que todo va bien y que el linfoma ha desaparecido. "En agosto, este mal sueño habrá desaparecido", asegura Dani.

El actor malagueño de 40 años, ganador del Goya en 2015 a mejor actor revelación, presentador, comediante y gran amante de los animales informa este martes en su Instagram que una vez superada la quimio, el equipo médico que le atiende ha decidido que se someta también a radioterapia "por precaución". 

Dani Rovira ha publicado una fotografía en la que se tapa la cabeza con una máscara de burro. Y la acompaña del siguiente texto:

"¡Se acabó la QUIMIO! 8 sesiones y 4 meses entre pecho y espalda. Secuelas: pérdida de pelo, las venas de los brazos duras como bridas y cabeza de hipopótamo (de ésta última no me comentaron nada). Si a alguien más le ha pasado esto, que me escriba, con cuatro que seamos, organizamos un Tragabolas.

Esta semana empiezo a afrontar 18 sesiones de RADIO, una cada día. Aunque los linfomas han desaparecido, los médicos lo han decidido así por cauterizar y precaución. A mediados de Agosto, este mal sueño habrá acabado y podré retomar de nuevo “la normalidad” si es que hay algo normal ya en este mundo.

Me queda la última pantalla del videojuego... Ojalá cuando acabe se me ponga cabeza de koala. Me gustan mucho los koalas.

“La vida me sonríe, pero siempre espero que me suelte carcajadas”.

Sois tant@s los que me estáis curando...

Ánimo a l@s que estáis en la lucha. Tenemos unos médicos y un personal sanitario espectacular en este país. El resto es quererse y dejarse querer.
 

Compartir en: