Tendencias actuales cada vez más personales en la moda
Las tendencias más actuales nos hablan de una moda muy heterogénea, tanto para hombre como para mujer, que no atiende a las tendencias generales que intentan establecer las grandes marcas de moda, como Yves Saint Laurent, Prada o Balmain, que continúan con sus propuestas novedosas para cada temporada.
Se trata, si, solo de tendencias, pero el estilo urbano y desenfadado, adaptado a cada situación, hace que los consumidores opten por tipos de prendas muy variadas, que conjugan, en cada caso, con prendas ya existentes en su fondo de armario.
Este verano que poco a poco va quedando atrás hemos visto cómo se han impuesto para las chicas los vestidos florales, siempre frescos y atractivos, y que se pueden llevar en cualquier ocasión. Los vaqueros y otros tipos de pantalones usados son ya un eterno que nunca cambia, y que se ha complementado con camisetas clásicas, aunque el blanco ha predominado recuperando un tono que ya fue muy aplaudido hace años.
Las tendencias actuales hacen que consumidores y clientas busquen sus prendas no solo en los grandes establecimientos y almacenes con todo tipo de marcas de ropa, sino también en comercios y tiendas de ropa muy personales donde encontrar aquella prenda que nos falta o nos complementa bien.
Es por ello que muchos de estos comercios, a la hora de poder competir y diferenciarse del resto, han ido optando por etiquetas de ropa personalizadas con la imagen de su establecimiento, confiriendo una marca propia exclusiva que les diferencia del resto e incorporando etiquetas a sus prendas como las que elabora Dutch Label Shop.
Y es que, una etiqueta personalizada de nuestra tienda preferida, marca la diferencia en estilo, calidad y atención al cliente, dejando en el comprador una huella que perdura en el tiempo y que implica trato cuidado y personalizado. Algo que distingue nuestra tienda favorita y que nos mantiene ligados a ella.
Las hay de todo tipo, y en muchas tiendas pequeñas y exclusivas podemos encontrar etiquetas personalizadas en tela o bordadas, etiquetas de tallas, etiquetas que muestran el cuidado de la prenda, como se lava o plancha y etiquetas de cartón para colgar en la prenda.
También ha sido este verano el momento de los complementos pequeños y minimalistas, buscando efectos en las prendas y detalles como forma de destacar. Ese ha sido el caso de los cinturones, ajustados a la cintura, aunque los zapatos planos han sido otra tendencia que se ha ido imponiendo poco a poco, del invierno al verano, así que cundo pensemos en cómo llevar un estilo informal pero que quede bien, por ejemplo, con un vestido, una recomendación es la de mezclar estas prendas con zapatillas deportivas o calzados tipo bailarina.
Esto seguirá entre temporadas, de cara al otoño y también será una tendencia predominante en invierno. Aunque para el cambio de temporada los expertos ya han abierto el cajón de la innovación, proponiendo la recuperación de las faldas plisadas o los toques metalizados incluso en los pantalones. Los motivos ecuestres y los estilos inspirados en la hípica también vuelven, así como la llamada raya diplomática, seguramente más enfocada a las chaquetas o trajes para entornos laborales o profesionales.
Estemos pendientes a las nuevas tendencias y a esas pequeños artes de los establecimientos y comercios únicos a los que nos gusta ir a comprar ropa.