La vida es una caja de sorpresas en "Cuéntame cómo pasó"
La vida es una caja de sorpresas es el título del nuevo capítulo de Cuéntame cómo pasó en el que los espectadores asistirán al dilema profesional de Toni; a un nuevo sueño empresarial de Antonio, con la mirada puesta en la Expo de Sevilla; y a la valiente actitud de María, que decide tomar la iniciativa con su nuevo profesor de Biología.
Además, la serie incorpora en esta entrega a la actriz Beatriz Argüello que da vida a Belén, profesora de interpretación de Inés Alcántara y de su amiga Laia.
Capítulo 351: La vida es una caja de sorpresas
Diciembre de 1989. La repentina muerte del jugador de baloncesto, Fernando Martín, hace que Toni reflexione sobre lo vulnerables que somos. Después de recibir una tentadora oferta de Antena 3, que iniciará sus emisiones en breve, se enfrenta al dilema de llevar una vida más acomodada o hacer lo que realmente quiere en su profesión.
La celebración en 1992 de la Expo en Sevilla está generando mucha actividad y las empresas de medio mundo se pelean por tener presencia. Mercedes anima a Antonio a que intente hacerse un hueco y, como era de esperar, él le toma la palabra. Lo primero que hace es tirar de contactos y recurre a Montero, muy bien relacionado con el Gobierno y antiguo vecino de Los Altos de San Genaro.
La estancia de Laia en casa de Inés se alarga, y deciden apuntarse juntas a un curso de interpretación. La chica es encantadora pero Marcos, el novio de Inés, empieza a sentirse algo incómodo con su presencia.
Mientras tanto, María sigue colada por su profesor de Biología y en una visita del instituto al Museo de Ciencias Naturales, decide tomar la iniciativa.
Y después… Ochéntame otra vez
La aprobación de la Constitución en 1978 abrió la puerta a una nueva organización territorial del Estado tras 40 años de férreo centralismo.
El nuevo capítulo de Ochéntame cómo pasó, Las Autononuestras, recorre una década en que fue testigo de un proceso de descentralización sin precedentes en nuestra historia. La solución autonómica bautizada como “café para todos” ocasionó numerosas tensiones tanto en las nacionalidades históricas como en como en el resto de las regiones. En la década de los 80 España se llena de banderas, símbolos y reivindicaciones identitarias.